Will Thomas lidera a un Valencia que seca al Alba y acaricia la Eurocup

Una brillante actuación de Will Thomas guió este martes al Valencia Basket en el primer encuentro de la final de la Eurocopa ante el Alba Berlin de Aíto García Reneses, que había hecho de la anotación su mejor arma pero que vio neutralizado su ataque por su debilidad en el rebote y la buena defensa de los locales, que están a un partido del título.

El choque arrancó acelerado, es decir con el Alba marcando un ritmo frenético sin importarle su poco acierto. El Valencia se vio empujado a subirse a ese tren y los puntos de Will Thomas, nueve seguidos, le permitieron hacerlo y le dieron impulso para, empujado por la Fonteta, abrir una primera brecha (17-10, m, 8).

Entró Antoine Diot a dar descanso a Sam Van Rossom ante la baja de Guillem Vives y el francés, machacado por las lesiones desde hace casi dos años, dirigió con soltura el ataque del Valencia y no sufrió en exceso en defensa.

El base encontró a Matt Thomas en la esquina débil del Alba y el escolta asestó tres triples casi seguidos que mantuvieron el cómodo dominio local. Pero el conjunto alemán no se puso nervioso y entre Luke Sikma, aclamado en su vuelta a la Fonteta, y Siva volvieron a conectarlo anotando pero sobre todo repartiendo juego (33-30, m.16).

Para compensar ese tirón, Will Thomas forzó su duelo con Sikma y le sacó la segunda falta pero aunque Aíto García Reneses protegió a Siva y a Sikma, Hermannsson se las arregló para que el que el Alba llegara vivo al descanso (41-38, m.20).

Arrancó con confianza el Valencia impulsado por el genio de Van Rossom pero Siva con sus triples y Giedraitis respondieron. Eso sí, tras sacarle la tercera a Sikma, Will Thomas asumió la responsabilidad ofensiva local y el Valencia aprovechó para abrir hueco,

Un parón por un problema en la mesa no detuvo a los locales, que con los tiros exteriores de Matt Thomas alcanzaron su máxima ventaja (67-51, m.28). Esa confianza les dio energía para su defensa ante un Alba bajo mínimos, que fallaba lo difícil y lo fácil.

El Valencia dobló al Alba en el tercer cuarto y llegó al último con media victoria en el bolsillo, pues tenía ya dieciocho puntos de ventaja. Tan hecho lo vio que se atrevió a dar un fugaz homenaje a su histórico entrenador Miki Vukovic en el descanso entre los dos cuartos.

El equipo alemán no se rindió y, de la mano de un mejorado Siva, reaccionó. En apenas tres minutos y medio con el inesperado Thiemann de líder anotador redujo a la mitad su desventaja (71-62, m.34).

Para pasar el mal momento, el Valencia se agarró a la solidez de la pareja interior que forman Will Thomas y Dubljevic, enormes en el rebote y certeros en varias acciones al poste y desde fuera, hasta que el reloj acabó con las esperanzas alemanas. 

Este viernes, segundo y ¿último? asalto en Berlín.

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